Las flores de mi jardín

El mundo es nuestro jardín. ¡Eliminemos las malas hierbas de la duda y reemplacémoslas con semillas de esperanza! 
                                                           Fotografia por N. Maya

viernes, 30 de abril de 2010

Los Chakras



Chakra es una palabra proveniente del Sánscrito, que significa rueda y se refiere a los centros energéticos del cuerpo. Actúan como receptores y transmisores de la energía universal y funcionan como válvulas reguladoras de este flujo. Su funcionamiento en el cuerpo es a nivel físico, mental, emocional y espiritual.

Siete son los principales y se encuentran a lo largo de la columna vertebral, tanto en la parte posterior como en la parte frontal del cuerpo humano o animal. 

Según los acupuntores chinos tenemos cientos de miles a lo largo de todo el cuerpo, que son considerados como chakras menores y se correlacionan con los puntos de acupuntura.

Los charkas interactúan con el cuerpo físico a través de dos vehículos principales: el sistema endocrino y el sistema nervioso. Cada uno de los siete chakras está asociado con una de las siete glándulas endocrinas, así como con un grupo de nervios llamado plexo. Por lo tanto, cada chakra puede asociarse a determinadas partes del cuerpo, y determinadas funciones dentro del cuerpo, controladas por ese plexo o glándula endocrina.
                                        

Nuestros sentidos, nuestras percepciones, nuestros posibles estados de conciencia, todo lo que es posible experienciar, se puede dividir en siete categorías. Cada categoría puede asociarse con un chakra en particular. Por lo tanto, los chakras representan no sólo determinadas partes de nuestro cuerpo físico, sino también partes específicas de nuestra conciencia.

El funcionamiento de los chakras refleja las decisiones que tomamos respecto a cómo queremos responder a las condiciones de nuestra vida. Abrimos y cerramos estas válvulas cuando decidimos qué pensar y qué sentir, y a través de qué filtro perceptivo (Chakra) elegimos experimentar el mundo que nos rodea (para más info sobre esto referirse al libro de Martín Brofman, Todo se puede curar).

Nos comunicamos con todo lo que nos rodea a través de estos centros. Cuando están abiertos y plenamente operativos, los chakras nos permiten alcanzar estados superiores de desarrollo interno y de la conciencia.

También contribuyen a nuestro desarrollo espiritual y al despertar, ayudándonos a construir un puente entre nuestro yo superior y “Dios”, la divinidad, el universo, o como prefieras llamarle.

Cuando algo no marcha bien en nuestras vidas, como por ejemplo en el tema de seguridad económica, hogar, amor, poder, comunicación, … el chakra asociado a esa parte de nuestra conciencia que experimenta el estrés se ve afectado y, en consecuencia, las partes del cuerpo físico asociadas a ese chakra.

La tensión en el chakra es detectado por los nervios del plexo asociado a ese chakra, y transmitida a las partes del cuerpo controladas por ese plexo. Cuando la tensión se mantiene durante un período de tiempo, o con un determinado nivel de intensidad, la persona crea un síntoma en el nivel físico.

El síntoma sirve para comunicar a la persona a través de su cuerpo lo que ha estado haciéndose a sí misma en su conciencia. Cuando la persona cambia algo en su forma de ser, habiendo entendido el mensaje comunicado por el síntoma, el síntoma ya no tiene razón de ser, y puede ser liberado.

En lo que respecta a Reiki, la mayoría de los seres humanos tienen uno, varios o todos los chakras, desequilibrados, mal funcionando, por exceso o por defecto, o con falta de armonía.

Esto es porque somos seres dinámicos, emocionalmente "inestables". La naturaleza dinámica de nuestras emociones y pensamientos, a menudo tienen repercusión directa en nuestra forma de vida, niveles de energía y en el funcionamiento de nuestros chakras.

Cuando los chakras se encuentran en un estado disfuncional, congestionados, desequilibrados, estancados, bloqueados o cerrados, necesitan tratamiento energético para que la armonía se restablezca. Reiki funciona especialmente bien en el equilibrio y limpieza de los chakras, despejándolos para que la energía puede fluir de manera natural.



A continuación, algunos ejemplos de los signos y efectos positivos, como resultado de nuestro proceso de desarrollo a través de la armonización de los chakras:

  • La persona comenzará a dejar de lado la carne y la ingesta de alimentos pesados.
  • Otros apetitos se vuelven más controlados y equilibrados, por ejemplo: sexo, alcohol, lujuria, etc.
  • La persona siente la necesidad de equilibrar el peso corporal y comer sólo cuando sea estrictamente necesario. Uno disfrutará mucho más lo que come.
  • La persona tiende a dormir menos y se siente con más energía.
  • La persona puede perder interés por las religiones tradicionales, mientras que sentirá su corazón lleno de amor y compasión hacia todos los seres humanos, la naturaleza y la existencia.
  • Se amplía su visión de la vida.
  • Después de desarrollar los chakras superiores, los inferiores se sigen.
  • Clarividencia y clariaudiencia son a menudo naturales y subproductos de seres más desarrollados o sensitivos. La persona comienza a desarrollar aún más los sentidos, aprendiendo cómo discriminar y percibir la vida y la gente mucho mejor, sin caer en ilusiones, sin precipitarse en juicios o percepciones erróneas de la realidad.
  • La persona percibe fácilmente la diferencia entre lo verdadero y  lo falso y lo real y lo irreal.
  • La persona termina con todas las adicciones negativas por ejemplo: fumar, alcohol y otras drogas.


domingo, 18 de abril de 2010

El retorno de la Diosa y matrimonio de lo femenino con lo masculino.





En este mundo que vivimos es necesario el regreso de lo femenino. La apertura, el corazón, la intuición, el cuidado, la sensibilidad, la belleza…y no nos olvidemos que es necesario el equilibrio con lo masculino. El balance justo, ying y yang trabajando juntos, unidos, complementándose, bebiendo el uno del otro, alimentándose.



Este es el momento para llamar en cada uno de nosotros a la Diosa, que nos inunde con su frescura, suavidad, abundancia… Primavera es un buen momento para inspirarse en la belleza del paisaje, las flores, los árboles vistiéndose de colores, la vida despertando después del largo invierno y mostrándonos la laboriosidad de hormigas apresuradas, abejas polinizando y recolectando el polen, pájaros revoloteando y cantando. El olor de la hierba recién cortada, de los ríos fluyendo hacia el mar, de la tierra preparada para ser inseminada… Esto nos ayuda a reconectar con la naturaleza, con la esencia de lo que somos, con la Madre, que nos da, nutre y sustenta.

Llamemos y sintonicemos con esta energía, que nutre, da y sustenta, que abre su corazón para amar, cuidar y crear belleza, que ES, que permite, que ríe, juega y está conectada consigo misma y con toda la creación. 
Permitámonos ser seres más completos, aprendiendo y tomando las cualidades que vemos en ELLA. Durante muchos siglos hemos sido arrastrados, conducidos y dominados por las fuerzas masculinas. Es el tiempo de recobrar la parte que quedó dormida y reprimida. Es el tiempo de reencontrarnos con nuestro ser completo, tiempo de integrar ambas energías en nuestro sistema, en nuestras vidas. Abramos pues los brazos al ser que somos. 


jueves, 8 de abril de 2010

Celebrando la SALUD


Hoy día 7 de Abril, se ha celebrado el Día Mundial de la Salud, centrándose este año, en la urbanización y la salud, con el lema: Mil ciudades, mil vidas. Durante la semana del 7 al 11 se organizarán actividades y eventos en todo el mundo.

Mi invitación es celebrar la salud todos los días de nuestras vidas! Aquí una lista de posibles cómos:

  • Bebe mucha agua, dos litros al día es lo recomendado para mantener una óptima salud.
  • Reduce el consumo de productos nocivos como el tabaco, alcohol y comidas ¨basura¨.
  • Come verde, ligero y sano.
  • Mueve tu body. Sal a pasear, haz ejercicio, baila, haz el amor, …
  • Transforma tus pensamientos y tus emociones: think positive, feel positive!
  • Tomate tu ratito de silencio contigo mismo/a.
  • Empieza a eliminar ciertas palabras de tu vocabulario, como tengo que, debo, y sustitúyelas por puedo, he decidido. Lo mismo para el resto de los tiempos verbales de Tener que y deber. Notarás con el tiempo y el uso de las nuevas palabras que tienes el control de lo que haces, ya no es una obligación, tú eres el o la que decide.
  • Sonríe. Los demás te lo agradecerán J y tú te sentirás bien.
  • Ríe. Es una manera sencilla de… ¡hacer ejercicio!
  • Llora. Desahoga tus penas. Si no hay lágrima en el ojo, no hay arco iris en el alma.
  • Siente. Permítete tus emociones, no las reprimas, si están ahí es por algo, escúchate y descubre.
  • Ama, ama, ama y ensancha el alma. Ama a todas las criaturas y principalmente a ti mismo/a.
  • Comparte y compártete. Los tesoros que hay en ti sólo brillan cuando permites que los demás echen un vistazo. ¡Y no seas modesto/a!
  • Haz cada día algo de lo que te sientas orgullosa/o.
  • Emprende tus tareas con agrado y buen humor.
  • Aprende algo nuevo cada día.
  • Pide ayuda cuando la necesites. Aquí estamos para ayudarnos los unos a los otros.
  • Expresa tu amor. No te canses nunca de decirme que me quieres! Jajajaja … ¡Yo también te quiero!
Como ves, hay muchas cosas simples que puedes hacer cada día para celebrar la Salud. Así que… ¡¡a practicar!!
 Un abrazo xx


martes, 6 de abril de 2010

Iniciación a la energía sanadora de nuestros amigos los delfines




Quiero compartir contigo esta bella y sencilla meditación, que además es una iniciación a la energía sanadora de los delfines, esos maravillosos, inteligentes e infinitamente amorosos animales que moran en las aguas de nuestro planeta azul. Deseo que sea de tu agrado y te beneficie.

Ponte cómodo, con la espalda recta y los ojos cerrados.

Coloca tus manos sobre las piernas con las palmas hacia arriba, en actitud de recibir.

Haz tres respiraciones profundas. La primera para el alma, la segunda para la mente y la tercera para el corazón. Inhala vida, y exhala amor.

Con otra respiración profunda, acepta la energía sanadora y de amor incondicional de los delfines para que, a partir de ahora, forme parte de ti.

Relaja totalmente tu cuerpo y llama a los delfines permitiéndoles jugar y nadar alrededor tuyo. Con esta danza, el alma de los delfines se funde progresivamente con la tuya.

Siente como la energía de los delfines penetra en tu cuerpo a través del corazón activando la Llama Trina del Poder, Sabiduría y Amor divinos. Su calor se expande dentro de ti alcanzando cada una de tus células. Ahora puedes soltar, con ayuda de la respiración, el dolor y las heridas del pasado. 

Permite que la energía liberadora de los delfines fluya libremente por todo tu ser. Siéntete libre de simplemente ser.

Lleva tus manos al corazón para sellar el proceso. Despídete de los delfines en amor y profundo agradecimiento. Ellos acudirán para sanarte y sanar a otros a través de ti cada vez que los invoques.

Cuando te sientas preparado, haz una respiración profunda y abre tus ojos para volver al “aquí y ahora”. 


lunes, 5 de abril de 2010

Un momento para mí


He descubierto que unos minutos de silencio en mi día son importantes. Estos minutos suponen una gran diferencia, es una manera de entrar en contacto con mi ser más íntimo, donde reina la paz y la armonía. A veces me gusta empezar el día de esta manera, otras es mi forma de darme las buenas noches y otras simplemente cuando me apetece en cualquier momento del día. Busco un lugar tranquilo donde no voy a ser molestada. A veces necesito salir de casa e ir al jardín o al bosque, pero normalmente me siento frente al fuego de la chimenea, lo cual me encanta ya que es como tener una vela gigante que además no permite que me enfríe. Me siento con la espalda erguida, cierro los ojos y me concentro en mi respiración. Yo prefiero inhalar y exhalar por la nariz. Al principio mi mente suele estar muy ocupada y toda clase de pensamientos se presentan. Necesito estar atenta para no engancharme a ninguno de ellos. Sigo prestando atención a mi respiración, más nunca intento deshacerme de mis pensamientos. Los dejo pasar. Dejándolos pasar tal como vienen, como si de una película se tratara en la que yo sólo soy una espectadora, empiezo a notar cómo mi mente se va relajando y los pensamientos van tomando un ritmo más lento. Llegada a este punto, comienzo a experimentar una sensación de paz y bienestar recorriendo todo mi cuerpo. 

Esta práctica me ayuda a emprender el día con buen humor ya que me he permitido un momento para mí misma, o a terminarlo sintiéndome realizada, sabiendo que a pesar de lo que pueda estar pasando en mi vida, siempre tengo este refugio de paz y serenidad en mi interior. Me ayuda también entrar en contacto con mi ser interno, a conocerme mejor, a saber qué es lo que necesito, a ver mi camino con más claridad.